Recientemente, muchas personas han estado informando a través de redes sociales y grupos de padres en WhatsApp sobre la presencia de alacranes en diferentes vecindarios de La Perla del Sur.
Hace unos días, se supo que un niño que estudia en el área de Barrio Alvear no pudo asistir a clases debido a un diagnóstico de “escorpionismo” que le dieron en el Hospital Regional de Concepción, donde fue llevado por su madre.
Un padre de Barrio Independencia mencionó que encontró un alacrán en su casa y notó que era más pequeño de lo usual, y expresó preocupación porque es una especie venenosa.
En Tucumán, solo dos de las 16 familias de alacranes se consideran peligrosas: “Tityus trivittatus y Tityus confluens”. Estos tienen pinzas largas y delgadas, y su cuerpo varía de marrón claro a oscuro. T. trivittatus tiene tres líneas oscuras en la espalda y T. confluens es de color oscuro uniforme.
Los alacranes no peligrosos se caracterizan por tener pinzas cortas y fuertes, una variedad de colores y no tener un bulto debajo del aguijón.
En el Hospital Regional de Concepción, están viendo un aumento en las consultas médicas relacionadas con alacranes. El Ministerio de Salud Pública está llevando a cabo campañas para prevenir casos graves. Aunque los alacranes pueden estar presentes durante todo el año, se vuelven más comunes en las temporadas de calor y lluvia.