El Gobierno de la Provincia depositó los subsidios de septiembre en las cuentas de los choferes de la Unión Tranviaria Automotor (UTA), pero desde el gremio afirman que hasta que no se salde el mes de julio y el medio aguinaldo, no levantarán el paro.
En el noveno día sin circulación de colectivos en las calles tucumanas, el Gobierno depositó alrededor de $81 millones, lo que significa $20.000 para cada chofer, algo que no permite que el transporte público retorne a la actividad.
Este miércoles, representantes de UTA y de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT), se reunieron en la Secretaría de Trabajo para ver si podían llegar a un acuerdo, aunque eso no sucedió y se decidió pasar a un cuarto intermedio hasta el lunes.
César González, titular de UTA, afirma que “el paro va seguir hasta que los trabajadores cobren las remuneraciones del mes de julio. El viernes nos van a deber dos meses y medio. Es imposible prestar servicio en esta situación”.
Jorge Berreta, vicepresidente de AETAT, por su parte, manifiesta que “es un paro caprichoso, político por internas gremiales y no por realidades”, además de pedirle al gremio que “salgan a trabajar para cumplir con nuestros usuarios y la paz social”.
La lucha por solucionar el problema parece no tener fin, y hasta que se envíe el subsidio nacional la situación parece no cambiar. La medida de fuerza afecta a más de 600.000 usuarios que dependen del sector.