Si las negociaciones avanzan como hasta ahora, el gigante farmacéutico chino Sinopharm enviará el primer embarque de antígenos a la Argentina en junio para que el laboratorio Sinergium Biotech de Garín concrete la producción final de un millón de dosis por semana de forma casi inmediata.
Los contratos entre privados, Sinopharm y Sinergium, se firmarían la semana próxima y tienen la gestión y el aval de ambos Estados. La planta de Sinergium en Garín produce todas las vacunas de la gripe de la Argentina y de varios otros países latinoamericanos, además de las vacunas de la de neumonía de Pfizer y la de prevención del cáncer de cuello de útero de Merck, por lo que cuenta con capacidad para realizar el proceso ni bien llegue el elemento esencial de la vacuna: el antígeno.
El avance en el diálogo chino-argentino fue reflejado en un inusual tuit del embajador de China, Zou Xiaoli, quien dio a conocer que “se alcanzaron acuerdos para la producción de la vacuna Sinopharm en la Argentina”. En general, la diplomacia china es de bajo perfil y que el tuit surgiera de la embajada y no de los funcionarios argentinos es significativo. El diálogo clave fue mantenido, Zoom mediante, por la ministra de Salud, Carla Vizzotti, la asesora presidencial, Cecilia Nicolini, el embajador Zou Xiaoli, el embajador argentino en Pekín, Sabino Vaca Narvaja, el CEO de Sinergium, Alejandro Gil y representantes de Sinopharm.
Todo el peso recae en el acuerdo privado que no es tan privado. En primer lugar, porque la operación requiere de protocolos y autorizaciones estatales. O sea, es imposible el envío del antígeno -el elemento activo de la vacuna- sin el visto bueno del Estado. En el mismo andarivel corre el hecho de que Sinopharm es un supergigante farmacéutico, pero es una empresa estatal. Y del otro lado del carretel, el comprador de todo lo que se produzca será el Estado argentino. En el medio, además, hubo una gestión personal de Alberto Fernández con el presidente chino Xi Jinping.
Según pudo averiguar Página/12, la parte china hizo saber que puede enviar los antígenos -que vienen congelados- en junio. Eso daría la chance para terminar la producción -descongelar, formular, filtrar, embotellar- de forma rápida porque la planta de Garín lo hace con la vacuna de la gripe y está validada internacionalmente: cuenta con certificación de la FDA norteamericana y la EMA europea, equivalentes a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat). Sinergium Biotech es una empresa de las familias Bagó, Sielecki, Gold y Sigman.
El próximo paso que debe darse entre Sinopharm y Sinergium es concretar todas las determinaciones técnicas. Ambas partes se conocen hace siete años porque hubo una transferencia de tecnología de la empresa argentina hacia la china de un medicamento contra determinados linfomas. Por lo tanto, existe cierta confianza y un vínculo estable. El Estado abrió la puerta de la negociación y ahora las dos empresas tienen que precisar los términos técnicos y firmar los contratos. En Pekín afirman que están en condiciones de firmar la semana próxima y enviarían la primera partida de antígenos en junio. En Sinergium sostienen que se necesitan primero las precisiones técnicas y son más cautelosos.
La fabricación de la vacuna de AstraZeneca en Argentina
En paralelo, la ministra Vizzotti y la asesora Nicolini tratan de avanzar con AstraZeneca para que toda la vacuna se fabrique en la Argentina. En mAbxience de Garín ya se produce el elemento activo, pero la terminación se derivó a Mexico.
Vizzotti y Nicolini estuvieron con el embajador del Reino Unido en la Argentina, Mark Kent, para impulsar la gestión de que el laboratorio que tiene sede en Cambridge acepte que la totalidad de la vacuna se produzca en el país. Hasta ahora, Oxford-AstraZeneca exigía que en el proceso final -el que se hace en México- se utilicen filtros norteamericanos de una única pieza, que no existen en la Argentina y cuya exportación Estados Unidos tiene hasta ahora vedada. Habrá que ver si el gobierno británico puede interceder ante el laboratorio para que se pueden eludir los obstáculos existentes. Hay un factor que debería jugar a favor: AstraZeneca viene incumpliendo todos los compromisos. Y en especial, el que surgió de la fabricación del elemento activo en Garín, del que se enviaron a México más de 30 millones de dosis, sin que vuelva hasta ahora ni una sola dosis al país. De acuerdo a algunas versiones, AstraZeneca empezaría a enviar vacunas recién a fines de mes, aunque está la chance del envío de alguna partida desde Europa.
Respecto de la vacuna Sputnik, la versión es que habrá un nuevo vuelo en los próximos días. En el Ministerio de Salud no confirman el dato: dicen que se está gestionando, pero que por el momento está en veremos.