Los hermanos Rubén y Ángel Ale fueron condenados a 10 años de prisión en diciembre de 2017 tras ser considerados culpables por varios delitos. Este miércoles, “La Chancha”, recibió la libertad condicional debido a su buen comportamiento y por haber cumplido los dos tercios de la condena.
Tanto Rubén como “El Mono”, habían quedado detenidos por ser encontrados como culpables de liderar una asociación ilícita dedicada al lavado de activos provenientes de la trata de personas con fines de explotación sexual y el narcotráfico, entre otros delitos.
Los magistrados, en ese momento, también ordenaron un embargo en los bienes de los hermanos Ale por un monto superior a los $ 8 millones cada uno. Es el equivalente al doble de lo que, según la justicia, lavaron fruto de su accionar delictivo.
La investigación realizada al “Clan Ale”, comenzó en 2002, cuando Susana Trimarco, madre de María de los Ángeles “Marita” Verón, desaparecida en ese año, denunció a los mismos y el proceso judicial terminó en la condena de los integrantes de la organización.
En el fallo, también se tomó la determinación de otorgarle seis años de cárcel a María Jesús Rivero, ex esposa de Rubén Ale y considerada como una de las cabecillas. Además, recibieron condenas otros 10 miembros: Fabián González y Carlos Ocampo (siete años), Víctor Suárez y César Manca (seis años): Enrique Chanampa, José Lucero y Ernesto Catulo (cuatro años); Valeria Bestán, Julia Esther Picone y María Florencia Cuño (tres años). Por su parte, Oscar Dilascio, Sergio Parrado y el ex policía Hernán Lazarte fueron absueltos.
La noticia de su libertad condicional fue confirmada por Alejandro Biagosch, abogado de “La Chancha”, quien aseguró que la decisión se debe a que “reúne una serie de requisitos como el buen comportamiento, aparte de haber cumplido los dos tercios de la condena“.
Por decisión del tribunal, los hermanos Ale cumplen su condena bajo la modalidad de prisión domiciliaria, hasta tanto la sentencia quede firme, situación que no cambió hasta este 2020.
