Durante cinco años, Paola Tacacho sufrió un calvario por el que terminó siendo su femicida, Mauricio Parada Parejas. El autor de su crimen, la amenazaba por redes sociales y la acosaba esperándola afuera de su casa o cuando salía del gimnasio. Paola, que se encontraba desesperada, envió un audio a una de sus amigas, contando lo que sufría y que nunca llegó a pensar que le haría algún daño físico.
“Todas las veces que hice denuncias, a mí me pedían datos”, comienza el audio que Paola le mandó a su amiga y al cual tuvo acceso Mariana Romero. “A veces recibía llamadas de números privados de acá. Yo atendía y se quedaban mudos”, continúa.
En el mismo, Paola comenta que una de las psicólogas de la fiscalía le pidió sus datos y luego borró con corrector el número de teléfono: “Yo le dije lo que pasaba, que estaba recibiendo y ella borró con corrector el teléfono. Cuando ellos van y le muestran la denuncia porque él va con el abogado, él se pone a observar todas esas cosas y no dudo de que haya visto teléfono, mail, porque son datos que te piden”.
Además, la joven maestra se refirió a que Parada Parejas enviaba fotos suyas con mensajes por redes sociales, pero que en ese momento del audio no lo hacía porque ella las había cerrado.
“Yo me quiero sentir por afuera de esto, sé que no me tengo que molestar, son mensajes vacíos, que no tienen sentido. Sé que físicamente el chabón no me va a hacer nada, pero no puedo evitar ponerme loca cuando me llegan estas cosas, me arruinan el día”, dice en la parte final.
Cada vez que Paola Tacacho hacía una nueva denuncia su situación, en lugar de mejorar, empeoraba. Porque Mauricio Parada Parejas, al notificarse, accedía a sus datos e intensificaba el acoso. En estos audios, ella misma lo explica. Esta es su voz, la que ignoró la Justicia 5 años pic.twitter.com/yMhQqUdOtR
— ๓คгเคภค г๏๓єг๏ (@MarianaR31) November 3, 2020
Por otro lado, la periodista también pudo investigar que dos meses antes de su muerte, Paola había realizado su último pedido de ayuda ante la Justicia. En el informe realizado, Romero logró saber que el asesino padecía un “trastorno esquizoide de la personalidad”, y que le pidieron a su familia que se hicieran cargo de brindarle un tratamiento y mantenerlo alejado de ella.
En el marco del proceso, el femicida presentó entonces un certificado que daba cuenta de ese trastorno mental, por que le dan la posibilidad de sumar a alguien de su confianza que lo acompañe, eligiendo a su hermano. En la historia clínica, se especifica que padece el tipo de discapacidad es “total y permanente”. Aunque, debido a que se trataba de un problema de violencia doméstico, el proceso civil terminó cerrado.
Entonces, como aparece una posible discapacidad, a Mauricio se le da la posibilidad de que incorpore al proceso a alguien de su confianza que lo acompañe.
Y aquí viene la parte más interesante. A quién incorpora Mauricio: a su hermano. pic.twitter.com/KHOq0ttg01
— ๓คгเคภค г๏๓єг๏ (@MarianaR31) November 3, 2020
