REDACCIÓN @TucSinFiltro- El domingo pasado los tucumanos volvíamos a ser populares a nivel nacional. Pero no por nuestras famosas empanadas, tampoco por la aparición de algún coprovinciano en el programa gran hermano. No. Tucumán recobraba la fama por los casos de desnutrición y probreza estructural que mostró el programa la cornisa de Luis Majul. Ayer, el sector de la salud volvió a estar en jaque cuando se conoció la noticia de que el titular del PAMI, Luis Larcher, utilizó en un mitín político, combis que la institución emplea para el traslado de discapacitados.
Rápidamente, los referentes de La Cámpora en el Pami, salieron al cruce de Larcher, recordando que ya no pertenece al espacio político y asegurando que no es la primera vez que el titular de esta organización actúa de forma irregular.
El trasfondo de la novela política se remonta a los inicios del 2015 cuando Larcher fue denunciado por sus pares de La Cámpora e “invitado” a abandonar este espacio político. Al mismo tiempo, comenzaba a circular el nombre del abogado Carlos Garmendia como el sucesor “purasangre” designado por el movimiento político para reemplazar a Larcher.
Hoy asistimos a un nuevo capitulo de esta historia que incluye un aparente acuerdo de Luis Larcher con el alperovichismo. Según fuentes de casa de gobierno, el titular del PAMI ocuparía el cuarto lugar en un acople oficialista que conduce el secretario de la legislatura, Juan Antonio Ruiz Olivares. Esto explicaría la presencia de Beatriz Mirkin y Pablo Yedlin en la inauguración de la sede “Ateneo Eva Perón” donde Larcher llevó las combis del PAmi. Además, curiosamente la institución que dirige Larcher pasó a formar parte del programa estrela del gobierno “Tucumán en acción”.
Foto: Juan Pablo Duran