Este jueves por la tarde se confirmó que Baby Etchecopar (57) dio positivo a un test rápido de coronavirus. No presenta síntomas y este mediodía había hecho su programa en Radio Rivadavia como todos los días. El periodista habló con Infobae y confirmó que él y su pareja, Silvina Cupeiro, deberán permanecer aislados durante los próximos diez días.
Mientras está a la espera de un hisopado que termine de detectar si ya cursó la enfermedad o si la presenta en este momento, el conductor de Basta Baby (A24, lunes a viernes a las 23) permanece en su domicilio y esta noche se emitirá un programa repetido de su ciclo periodístico.
Su caso se suma al de otros periodistas del grupo América que sufrieron COVID-19 en las últimas semanas: Alejandro Fantino, Gustavo López, Eduardo Feinmann y Paulo Vilouta, entre otros.
La noticia terminó de darla a conocer en Twitter el periodista Pablo Montagna, uno de los columnistas de Baby en el medio, el ciclo del conductor en Radio Rivadavia.
Baby, conocido por su polémico estilo al hablar sobre la actualidad política, mantuvo durante este tiempo un fuerte cuestionamiento a la manera en que el presidente Alberto Fernández y el Ministerio de Salud hicieron frente a la pandemia.
En ese sentido, no dudó en convocar la marcha que se realizó en distintos puntos del país el pasado 17 de agosto. Incluso se lo vio de manera presencial, cubierto por un tapabocas en las adyacencias de la Quinta de Olivos, cerca de su hogar.
Baby Etchecopar en la Marcha 17A. Foto: Marcelo Carroll.
Días después, el conductor decidió escribir una carta abierta que leyó en su programa de radio dirigida a Alberto Fernández.
“Ninguno de los que fuimos a la marcha intentamos doblarle el brazo. Tal vez lo más cercano a su anatomía fue querer abrirle las orejas”, le escribió el periodista al mandatario, quien había criticado la convocatoria.
Por estas horas, mientras espera el resultado de su hisopado, Baby ya avisó que volverá al trabajo este viernes al mediodía en su programa por Radio Rivadavia, pero por vía telefónica.
Fuente: Clarín