La joven, que está presa desde hace cinco meses por el asesinato de Fernando Pastorizzo, será juzgada desde este lunes en los tribunales de Gualeguaychú. Podría ser condenada a prisión perpetua.
Hoy empieza el juicio oral y público por el crimen de Fernando Pastorizzo, ocurrido el 29 de diciembre de 2017. La acusada es Nahir Galarza, de 19 años, que en una segunda declaración confesó que mató de dos disparos a Pastorizzo, de 20 años.
Presa desde hace cinco meses, Nahir podría ser condenada a prisión perpetua, como lo reclamó la querella. Mientras que la defensa buscará centrar su estrategia en la relación conflictiva que tenía con el joven para mejorar la situación de la acusada.
Galarza será juzgada por “homicidio doblemente calificado por el uso de arma y la relación de pareja”, un delito que prevé una pena de prisión perpetua en caso de recaer condena.
Su defensa apuesta a comprobar que tenía un noviazgo violento con el joven asesinado. Allegados a Galarza recordaron que hay material en los teléfonos de ambos, peritados por Gendarmería, que incluyen audios, capturas, WhatsApp, entre otros, con fuertes insultos a la acusada.
El tribunal a cargo del debate estará integrado por los jueces Mauricio Derudi, Alicia Vivian y Arturo Dumont. Las audiencias estipuladas son para el 5, 7, 11,12, 14, 18, 19 y 21 de junio, pero por la cantidad de declarantes se pueden agregar fechas. Durante todo el juicio serán citadas más de 80 personas, entre testigos presentados por las partes y peritos.
Durante la primera audiencia se podrán escuchar los alegatos del Ministerio Público Fiscal; del abogado querellante, Rubén Virué, que representa a la madre de la víctima, y de los letrados Sebastián Arrechea y Juan Carlos Peragallo, que patrocinan al padre de Pastorizzo; y del defensor José Ostolaza. Se espera también que durante la primera audiencia y ante el Tribunal de Juicios y Apelaciones presidido por Mauricio Derudi, declare la joven imputada.
El crimen se produjo el pasado 29 de diciembre a las 5 en Gualeguaychú, cuando recibió dos disparos, uno en la espalda y otro en el pecho. Lo encontraron muerto en la calle, junto a su moto y dos cascos tirados.
En una primera versión, la chica dijo que los balazos partieron del arma reglamentaria de su papá, que integra la Policía de Entre Ríos. En una segunda presentación dijo que había sido su novio el que agarró el arma y que los disparos los había hecho en forma accidental. (minutouno.com)