“Si la quieren volver a ver…entreguen 2 millones”. Durante cinco horas una de las consideradas cabecillas de un clan vinculado con la venta y distribución de drogas permaneció secuestrada y a merced de aquellos a quienes considera como sus peores enemigos. Un inmenso procedimiento policial derivó en la liberación de Margarita Toro, la cara visible del grupo que lleva su apellido y que se encuentra en abierta guerra con los miembros del Clan Acevedo.
Según la investigación que inició la Justicia Federal, la mujer permaneció en el barrio 130 Viviendas privada de su libertad, luego de que varias personas a bordo de una camioneta Amarok blanca, la abordó en la calle, poco después de las 20. Su familia hizo la denuncia acusando a los miembros de dos grupos: por un lado los Acevedo y por el otro el conocido clan “Los 30” con quienes mantienen una disputa por el monopolio de la venta de drogas en diferentes puntos de la ciudad. Principalmente en la zona de los barrios Juan XXIII, La Bombilla y El Sifón, donde tienen su peso Los Acevedo, y Villa 9 de Julio, que es un lugar manejado por los Toro.
El secuestro sería la consecuencia de una serie de choques previos que mantuvieron los dos grupos junto con el emergente clan de “Los 30” en una lucha encarnizada por mantener su liderazgo.
Todo habría comenzado con el robo de una motocicleta que habría sido perpetrado en los últimos días por los Toro. El vehículo, cuyo costo es elevado, fue reclamado por los Acevedo durante varios días, de acuerdo con la información extraoficial. Por ese motivo empezaron una serie de peleas que terminarían desembocando en el secuestro de la mujer. Sin embargo, a la hora de denunciar el robo del vehículo, los Acevedo apenas dejaron consignado el hecho policial, sin acusar a nadie.
Los Toro, sin embargo, no anduvieron con vueltas y acusaron de forma directa a los Acevedo. La policía realizó diferentes procedimientos hasta que finalmente, la mujer apareció alrededor de las 2 de la mañana. Durante su cautiverio, la mujer habría sufrido agresiones físicas, de acuerdo a la primera información revelada. Por ese motivo, fue derivada al Hospital Centro de Salud, para ser asistida. Había sufrido golpes en la cabeza pese a que nunca perdió el conocimiento.
Al haberse producido un llamado telefónico en el que se reclamaba una suma de dinero por su rescata, la causa pasó a la Justicia Federal. La primera versión extraoficial indica que a los familiares de Toro le pidieron entre 1.5 y 2 millones de pesos. En el medio de la disputa-en apariencia menor por el robo de la motocicleta-está la pelea ciega por las zonas donde se distribuye diferentes sustancias y hasta una interna por el control de la barra de Atlético Tucumán. Lo que se dice, un estofado enorme que puede derivar en nuevos hechos violentos en el futuro.
