“Todos los que lo conocían a mi papá pueden dar fe de que era un hombre tranquilo. No puedo creer que por una discusión cotidiana que puede tener cualquiera le hayan arrebatado la vida a una persona”, dice Maxi Vázquez con la mirada cansina.
Maxi es hijo de Juan Carlos Vázquez, el hombre que falleció tras ser arrojado de un colectivo el pasado viernes, luego de mantener una fuerte discusión con un chofer de un interno de la línea 107 y el hijo de éste.
De acuerdo al testimonio del hijo de la víctima, la discusión se inició cuando el chofer del colectivo no quiso parar al momento que Vázquez tocó el timbre en una parada. El hombre se acercó hasta el chofer y le recriminó la negativa. En ese momento, siempre siguiendo la versión de Maxi Vázquez, el hijo del chofer, que en ese momento viajaba en el colectivo, se acercó y empujó a su padre con el coche en movimiento.
“Mi papá cayó sobre el pavimento semisentado. Cuando se quiso incorporar el hijo del chofer se bajó y le pegó una patada en la garganta. Mi papá cayó de nuevo y golpeó la cabeza contra el cordón de la vereda. Tuvo una triple fractura de cráneo, lo que le provocó la muerte”, aseguró Vázquez.
Juan Carlos Vázquez tenía 59 años y vivía en Las Talitas. Para volver a su casa luego de la jornada laboral tomaba siempre la línea 107 de colectivo en la parada de la calle Charcas y Avenida Brígido Terán, frente a la terminal de ómnibus.
“A mi me llamaron por teléfono, yo estaba trabajando. Me dijeron que lo encontraron a mi papá frente a la terminal tirado. Le agradezco a los policías que lo asistieron y a la fiscal q se esta moviendo rápido”, finalizó.
Por otro lado, el hijo de la víctima indicó que le acercaron versiones que aseguran que los involucrados en la muerte de su padre tendrían antecedentes policiales.