Luego de 24 horas de agonía, Juan Carlos Vázquez perdió la vida. El pasado viernes por la tarde el hombre de 59 años había subido a un interno de la línea 107 en la zona de El Bajo para regresar a su casa de Las Talitas.
Por causas que se están investigando, el hombre habría sido arrojado del vehículo por el chofer y su hijo, que viajaba en ese momento en el colectivo, luego de mantener una fuerte discusión.
El hombre fue trasladado de urgencia al Hospital Padilla, donde le diagnosticaron un traumatismo encéfalo craneano, y quedó internado en estado de coma. Finalmente, Vázquez perdió la vida en la noche del sábado.
Los familiares de la víctima aseguran que fue atacado por el chofer del colectivo, Juan Pablo Rivas de 46 años y por su hijo Pablo Agustín Rivas, de 19. De acuerdo a la versión de la familia, Vázquez habría tocado el timbre en una parada para bajarse del colectivo. Sin embargo, el chofer no paró, por lo que Vázquez se acercó a recriminarle la actitud.
Ante esto, se desencadenó una fuerte discusión y tanto el chofer como su hijo comenzaron a golpear a Vázquez hasta tirarlo hacia el pavimento. Luego, siempre siguiendo la versión familiar, Pablo Agustín le pateó la cabeza cuando Vázquez aún no había podido incorporarse.
Los supuestos agresores quedaron aprehendidos. En su declaración, contaron una versión completamente diferente a la de la familia de la víctima. Dijeron que Vázquez se trepó al colectivo en una antigua parada de calle Charcas. Cuando logró subirse discutió con el chofer, quien trataba de explicarle que el colectivo ya no tiene parada en esa calle por motivos de seguridad. Cuando la discusión subió de tono, dijeron los Rivas, el hijo del chofer quiso intervenir y Vázquez se tropezó y cayó al pavimento. En ese momento fueron imputados por lesiones graves. Ahora, tras la muerte de Vázquez, la carátula cambió a homicidio.
