Un hombre de 30 años que trabajaba como mozo en un bar del centro de la capital tucumana, falleció en la madrugada de este viernes tras recibir un disparo en un asalto.
Se trata de Diego Costilla, publica el sitio Periódico Móvil. El muchacho volvía a su casa después de haber compartido un partido de fútbol con amigos cuando fue interceptado por delincuentes que intentaron sacarle la motocicleta. Aparentemente se habría resistido y recibió el disparo.
Costilla fue trasladado al Centro de Salud, donde lamentablemente murió.