La siguiente es la reproducción de una columna publicada en la página web El Rincón del Lobo Jujeño que reflexiona sobre la circunstancia de que el triunfo de San Martín sobre Gimnasia y Esgrima de Jujuy fuera presenciado por mayoría de hinchas cirujas que llegaron al estadio 23 de Agosto, donde se jugó el partido en el que el Santo goleó por 3 a 0.
Los hinchas “cirujas” dijeron presente en Jujuy y se ubicaron en una tribuna que se diferenciaba notoriamente con el vacío del resto del estadio, por la ausencia de público local. Este hecho, el que hubiera hinchas con la camiseta albirroja y no aquellos que visten la celeste y blanca del “Lobo Jujeño” es el que es analizado en el sitio web en cuestión.
El local, no fui yo
Muy pocas veces escribo lo que siento. Pero lo de ayer me dio vergüenza como socio e hincha, sentí impotencia y soledad, en medio de una marea de hinchas tucumanos.
Mi nombre es Jorge Luis Chocobar Pantoja, soy director de El Rincón del Lobo Jujeño, página que cree en 2012, en mis principios en el periodismo y que hoy con más de cinco años, cuenta con más de 240.000 visitas. Tengo 25 años y desde 2002 soy socio del club que amo, Gimnasia y Esgrima de Jujuy.
Cada vez que Gimnasia juega de local, una de las cosas que más me desespera es ir a la cancha. A tal punto que espero ansioso el pitazo inicial de cada partido para estar ahí, cerca del rectángulo de juego tratando de reflejar en fotos, los mejores momentos de los partidos.
A veces me gusta darme vuelta y mirar a los ojos a los hinchas, esos sufridos personajes que le dan ritmo y color a cada encuentro de local. El que paga su entrada porque siente lo mismo que yo, amor por el club de su provincia, el más grande de Jujuy.
Pero ayer, en el partido ante San Martín de Tucumán algo pasó. Me sentí solo, sentí una sensación de vacío enorme en mi interior. ¿Qué pasaba? Los hinchas del “Santo” se apoderaban de las tribunas, ¡de nuestras tribunas!.
¿Qué no era que no se permitía el público visitante? El parte emitido por el club era claro y expresaba “Por disposición de la Asociación del Fútbol Argentino NO se habilitará la venta de entrada para tribuna visitante”.
¿Entonces qué sucedió? Muchos podrán decir, “son hinchadas amigas”. ¡Amigas las pelotas!, mi casa se respeta, en mi casa mando yo y no voy a permitir que venga cualquiera a cantarme sus canciones, mucho menos a gozarme y a gritarme los goles en la cara.
Seguramente no soy el único molesto con esta situación, pero no voy a caer sobre los hinchas albicelestes, porque la verdad tengo que aplaudir a ese grupo en la Lobo Norte que por momentos fue el único que cantó a favor del local.
Al Sr. Jefe del operativo policial, a usted le pregunto, ¿qué pasó? Si no se permitía el ingreso del público visitante, ¿por qué permitieron el ingreso de tantas personas identificadas con sus camisetas blancas con rojo?. ¿Por qué no permitieron el ingreso de banderas? El parte de prensa era claro y expresaba “Banderas superiores a los 2 x 1 mts, serán retiradas” ¿Y las banderas más chicas por qué también fueron retiradas?
A los dirigentes les pregunto, ¿Por qué se vendieron tantas entradas a gente identificada con los colores de San Martín de Tucumán?. Si bien es sabido que Gimnasia y Esgrima necesita recaudar y de local últimamente no lleva mucha gente, ¿era necesario?, ¿por qué no respetaron la prohibición de los hinchas visitantes? O directamente, ¿no era más fácil ubicarlos a todos en un mismo sector?
Ayer como socio me sentí defraudado por ustedes señores, porque considero que no cuidaron a sus hinchas y más aún, se les rieron en la cara. ¿Así quieren que vuelva la familia a la cancha?
Que equivocados que están… hoy somos el hazme reír del noroeste argentino.