Un asesinato ocurrido el sábado por la tarde en el barrio Juan XXIII, conocido popularmente como “La Bombilla“, conmociona a los vecinos de la zona por la violencia que desató. Denuncian que en la pelea utilizaban ametralladoras y otras armas de grueso calibre.
Pasadas las 17 del sábado fue ingresado a la guardia del hospital Avellaneda el cuerpo ya sin vida de Javier “El Cabezón” Zelarayán (37 años). Los médicos constataron que había fallecido por los disparos que había recibido en la espalda.
Según comentaron en el centro de salud, la víctima miraba un partido que se disputaba en la cancha de “La Bombilla” cuando llegaron en una moto, un tal “Meco” y un tal “Crillín”, que dispararon contra Zelarayán, quien tenía antecedentes por robo.
Una hora después ingresó al mismo hospital Avellaneda Mayra Noelia Olivera, de 22 años. Según sus familiares, estaba parada en la puerta de su casa del barrio 123 Viviendas y abrieron fuego los ocupantes de un auto blanco.
Pasadas las 21 ingresaron al mismo nosocomio Eric Zelaya (20) y Patricia Reyes (27). Según denunciaron en la guardia policial del lugar, fueron atacados en la esquina de Juan José Paso y Venezuela por dos jóvenes que se movilizaban en una motocicleta. Ambos recibieron disparos en una pierna y en un brazo.
Personal de la División Homicidios, al mando de los comisarios Hugo Cabezas, Sergio Juárez y Daniel Cuellar, comenzó a investigar el caso. En ninguno de los lugares donde se produjeron los ataques encontraron personas que pudieran aportar datos de lo que ocurrió.
Las pesquisas sospechan que todos los hechos están relacionados. No se descarta que la mujer fue herida en un ataque para vengar el crimen del “Cabezón” y que la pareja sufrió esas heridas como un mensaje. El móvil de los enfrentamientos aún no está claro.
Pasadas las 23, personal del 911 capturó a “Crillín” Ale, de 18 años, como sospechoso de formar parte de la balacera que terminó con la vida de Zelarayán. Pero el detenido se escapó cuando era trasladado a la dirección de Sanidad, para hacerle un examen médico. Según se informó, atacó a uno de los policías que lo escoltaban y huyó por Chile y Alberti, en donde le perdieron el rastro.
La fiscala María del Carmen Reuter, en primera instancia, decidió aprehender a los uniformados y en la mañana de este domingo firmó la autorización para que recuperaran la libertad. Sin embargo, desde la fuerza les iniciaron un sumario administrativo.
En medio de esta seguidilla de actos violentos, a las 2.30, Miguel Angel “Meco” Reyna, de 34 años, fue ingresado al Centro de Salud con una herida de arma de fuego en el abdomen. Tomó participación la División Homicidios y la fiscala Reuter dispuso la aprehensión de Reyna ya que se sospecha que, junto a “Crillín”, habrían participado del ataque que terminó con la vida de Zelarayán.