El 16 de mayo se cumplen cien años del nacimiento de Juan Rulfo, uno de los exponentes más importantes de la literatura mexicana. Con apenas dos novelas y algunos cuentos, dejó una huella imborrable en América Latina y generó un impacto en otros colosos de las letras hispánicas.
Juan Rulfo nació en Jalisco (México), el 16 de mayo de 2017. Su obra consistió en una veintena de cuentos cortos y dos novelas. A pesar de que no fue un autor “de múltiples tomos”, generó un punto de quiebre en la narrativa latinoamericana y del mundo de habla hispana, explicó a Sputnik el catedrático en Literatura Latinoamericana de la Universidad de la República de Uruguay, Hugo Achugar.
“Su obra es fundamental. Pedro Páramo es uno de esos libros que implica un antes y un después de su escritura. Yo creo que su vigencia es indiscutible y eso queda demostrado cuando incluso jóvenes lectores vuelven a esa escritura tan concisa, tan cargada de una serie de connotaciones, de evocaciones, de imaginarios, pero a la vez con una estructura muy revolucionaria”, dijo Achugar.
En 1961, Gabriel García Márquez dio con la obra de Rulfo mientras vivía en México, donde tenía planeado hacer guiones cinematográficos. Luego de escribir sus primeros libros y de vivir en Nueva York y País, ‘Gabo’ se sentía “metido en un callejón sin salida (…) buscando por todos lados una brecha para escapar”.”En ésas estaba, cuando Álvaro Mutis subió a grandes zancadas los siete pisos de mi casa con un paquete de libros, separó del montón el más pequeño y corto, y me dijo muerto de risa: ‘Lea esa vaina, carajo, para que aprenda’; era Pedro Páramo”, narra el autor colombiano en un artículo.
“Aquella noche no pude dormir mientras no terminé la segunda lectura; nunca, desde la noche tremenda en que leí ‘La metamorfosis’ de Kafka, en una lúgubre pensión de estudiantes de Bogotá casi 10 años atrás, había sufrido una conmoción semejante”, prosigue.
Tras Pedro Páramo, ‘Gabo’ leyó ‘El llano en llamas’ (1953), una recopilación de cuentos. El impacto de ambos títulos fue tan grande que “el resto de aquel año [1961] no [pudo] leer a otro autor, porque todos [le] parecían menores”.
En diálogo con Sputnik, Achugar consideró que Rulfo y García Márquez “son dos escritores muy diferentes”, por lo que “no se pueden comparar estrictamente”. El catedrático subrayó que hay “muchos matices” que no permiten hacer “observaciones absolutas”. No obstante, en la estructura de los cuentos de ambos autores “hay puntos de contacto”.
“Hay muertos que hablan. Están las tradiciones, el peso de lo colectivo y de lo popular, pero fueron apuestas diferentes en García Márquez. Creo que hay —y es uno de sus aciertos— lo mismo pero con una escritura más torrencial, más desbordada, en cierto modo tocando por momentos lo onírico. En el mundo de Rulfo está eso pero con la contención. Si usted lee los cuentos de Rulfo son de una precisión milimétrica”, comentó el académico uruguayo.
En su artículo sobre Rulfo, García Márquez expresa que “el escrutinio a fondo de la obra de Juan Rulfo [le] dio por fin el camino que buscaba para continuar [sus] libros”. “No son más de 300 páginas, pero son casi tantas y creo que tan perdurables como las que conocemos de Sófocles”, dijo el premio Nobel.
Además de novelas y cuentos cortos, Rulfo escribió guiones cinematográficos. Pero en la otra vertiente de expresión artística en la que descolló fue la fotografía. A criterio de Achugar, exdirector nacional de Cultura de Uruguay, “no es simplemente una obra fotográfica: es la obra de un artista visual”. Su caso es similar al de “muchos artistas en América Latina, que no se limitan exclusivamente a una disciplina porque la creatividad los desborda”.
Fuente: https://mundo.sputniknews.com/cultura/201705161069183663-juan-rulfo-escritor-centenario/