El DJ Jorge Martínez Poch fue condenado a 37 años de prisión por el abuso de sus dos hijas cuando eran niñas y encerrar, golpear y violar a su novia Vanesa Rial durante septiembre de 2013.
El Tribunal Oral en lo Criminal 1, integrado por los jueces Juan José Ruiz, Carmen Palacios Arias y María Isabel Martiarena, basó su fallo en la Ley de Violencia contra las mujeres y la Convención de los derechos del Niño.
Tras el veredicto, que se dio a conocer alrededor de las 11.30 de hoy, Ruiz explicó que Martínez Poch “quería cubrir los delitos, lavar las pruebas” y por lo tanto tenía “conciencia” de lo que hacía.
“Es el día más feliz de mi vida”, dijo Rial en la sala, quien celebró el fallo junto a las personas que presenciaron la lectura del veredicto. La víctima sostuvo que es “un fallo ejemplar” y agradeció al presidente del Tribunal: “Todos tendrían que ser como él”, agregó.
La fiscal María Florencia Budiño había pedido que Martínez Poch sea condenado a 40 años de prisión por considerar que los hechos que se le imputan al disc jockey “se encuentran probados” por los delitos de “corrupción de menores agravada por violencia, amenazas, intimidación y vínculo de parentesco en concurso real con abuso sexual, gravemente ultrajante agravado por el vínculo de parentesco y por el grave daño a la salud mental” en perjuicio de sus dos hijas.
También le imputó “abuso sexual con acceso carnal reiterados, agravado por el grave daño en la salud mental y por haberse cometido por dos personas cuanto menos en un hecho en concurso real con privación ilegal de la libertad agravado por haberse logrado el propósito perseguido” en perjuicio de Rial.
El defensor, Juan Martin Cerolini, había reclamado la absolución al sostener que es una persona “inimputable” y por otro lado consideró que durante el debate “no se pudieron probar” los abusos contra las hijas del imputado. Para Cerolini, en la pareja formada por Rial y Martínez Poch “existió una relación afectiva normal que, para los de afuera, era anormal”.
fuente: infocielo.com