En una primera etapa el botón fue instalado en el Hospital Padilla, Avellaneda, de Niños, Maternidad y Las Moritas. Está previsto además que se instale en policlínicos que funcionan las 24 horas.
El objetivo principal del botón antipánico es complementar la seguridad física y electrónica con la acción proactiva por parte de la vigilancia; la actuación inmediata ante una emergencia y bajar los índices de vulnerabilidad en ese sector de riesgo. Es lumínico-sonoro y está ubicado estratégicamente en los sectores de atención al público, que es donde más pueden darse los conflictos y que a veces terminan siendo de agresión física. Allí es donde los familiares de los pacientes deben concurrir para realizar trámites administrativos y los tiempos de espera pueden llegar a generar una intolerancia, ya sea con el personal o entre los mismos usuarios.
. “Ni bien se detecta un problema que amerite su uso, una persona de seguridad oprime el botón ubicado dentro del box de admisión y la alarma se activa, con luz y sonido”, explicó el coordinador de Seguridad del Ministerio de Salud, licenciado Federico Jordán, quien además aclaró que el botón solo puede apagarse con una llave. “De esta manera nos aseguramos el hecho de que solo dejará de sonar cuando un encargado de seguridad considere que es el momento de hacerlo”, agregó.
El botón antipánico se implementó en el marco del Plan de Seguridad, que tiene como único objetivo resguardar la salud física de los trabajadores de la salud.
En ese sentido se ha trabajado en el enfoque referido al desarrollo de políticas de seguridad, con una intervención in situ y planificada para esta instancia. Se colocan estos botones como un sistema de alerta complementario a la seguridad física de la vigilancia privada y de la policía de la provincia desplegada en los hospitales públicos.
fuente: comunicaciontucuman.com
