Un preso identificado como Gonzalo Rodrigo Díaz, de 22 años, fue encontrado ahorcado este martes en el interior de un arresto de la Comisaría Segunda de Barrio Sur, en San Miguel de Tucumán. El joven había sido detenido ese mismo día tras ser reconocido por un portero en un edificio, ya que contaba con una condena. Apenas 35 minutos después de su ingreso a la comisaría, el personal policial lo encontró sin vida.
El fiscal Carlos Sale, titular de la Fiscalía de Homicidios II, intervino en el caso junto con el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF), dirigido por Juan Pablo Godoy. La investigadora Paula Orellana también participó en las tareas en el lugar.
Según informaron fuentes judiciales, Díaz había sido aprehendido en enero por una causa de hurto. Sin embargo, este martes volvió al mismo edificio donde había cometido el delito y fue identificado por el portero, lo que llevó a que la fiscalía de Robos y Hurtos ordenara su detención.
“El recluso ingresó a la comisaría a las 15:55 y a las 16:30 fue hallado colgado”, informó el fiscal Sale, quien supervisó las pericias en la escena. También señaló que el cuerpo será sometido a una autopsia para esclarecer las circunstancias de la muerte.
