El riesgo país de Argentina cayó por debajo de los 500 puntos este martes, alcanzando su nivel más bajo desde mayo de 2018, al reducirse más de 100 puntos básicos y ubicarse en 454 puntos, según datos de JP Morgan. Este descenso se debe al creciente interés de los inversores en bonos y acciones nacionales, impulsados por expectativas de recuperación económica y pagos de vencimientos de deuda.
El indicador, que mide la diferencia entre los bonos argentinos y los del Tesoro de Estados Unidos, experimentó una disminución de 114 unidades. Este retroceso fue favorecido por los pagos de títulos Globales (ley extranjera) y Bonares (ley argentina), que reducen la tasa de retorno implícita en estos activos, contribuyendo a la baja del riesgo país.
El próximo jueves 9 de enero será clave, ya que se realizarán pagos por U$S4.360 millones en bonos soberanos argentinos, según destacó Maximiliano Donzelli, mánager de Estrategias de Inversión en IOL. De este monto, U$S460 millones irán al Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), U$S60 millones al Banco Central, y U$S3.860 millones a los tenedores privados de deuda, siendo los bonos AL30 y GD30 los que recibirán la mayor parte del pago, con U$S2.350 millones.
Este flujo de reinversiones esperado por los inversores podría incrementar la demanda de bonos soberanos, reduciendo aún más la brecha de tasas y acelerando la caída del riesgo país, según analistas del mercado.