Los pronósticos privados indican que la inflación de noviembre podría mostrar un leve aumento, rompiendo la tendencia a la baja de los últimos meses. Esto genera incertidumbre en el programa económico del gobierno, que busca estabilizar los precios y avanzar hacia la eliminación del cepo cambiario en 2025.
El equipo económico, liderado por el ministro Luis Caputo, trabaja en medidas para reducir la inflación, como disminuir la devaluación del tipo de cambio oficial, conocida como crawling peg, a partir de enero. La meta es bajar la depreciación mensual del 2% actual al 1%. Además, la eliminación del impuesto PAIS, prevista para menos de un mes, ya comenzó a aplicarse en la mayoría de las importaciones y podría impactar en los precios, ayudando a controlar la inflación.
El plan del gobierno también incluye medidas para mejorar la economía a largo plazo. Caputo estima que, aunque la eliminación del impuesto PAIS reduzca la recaudación fiscal, el aumento de la actividad económica compensará esa pérdida. De hecho, se recalculó el crecimiento económico esperado para 2025, subiéndolo al 6%. Según los expertos, estos cambios podrían estabilizar los precios y generar un costo de vida más bajo para 2025, con una inflación anual del 18%, algo no visto en años en Argentina.
Sin embargo, los riesgos persisten. El economista Miguel Kiguel señaló que el proceso de eliminación del cepo cambiario deberá ser gradual para evitar problemas con las reservas del Banco Central y satisfacer las necesidades de las empresas que buscan girar dólares al exterior. Advirtió que, aunque el peso se apreció recientemente, la historia muestra que episodios similares han terminado en grandes devaluaciones.
Por otro lado, un informe de la consultora 1816 destacó que, aunque el escenario actual da motivos para el optimismo, como el potencial de Vaca Muerta y un posible superávit fiscal, cualquier complicación internacional podría poner en riesgo la estabilidad lograda.
A pesar de las dificultades, el gobierno apuesta a que estas medidas, junto con una inflación mensual cercana al 2,5% en el primer trimestre de 2025, permitirán avanzar hacia la eliminación del cepo y estabilizar la economía en el mediano plazo.
