Un repartidor de bebidas ha huido con la recaudación del día y es intensamente buscado por la policía. Los dueños del miniservice Riki y la distribuidora Miqueas, ubicados en Coronel Zelaya 1183, denunciaron que un empleado escapó con aproximadamente 1,5 millones de pesos. Este dinero correspondía a la recaudación obtenida por el reparto de bebidas en distintos puntos del Gran San Miguel de Tucumán.
La denuncia presentada ante el Ministerio Público Fiscal indica que el hombre habría aprovechado un descuido al final de un día de trabajo para llevarse el dinero.
Actualmente, la policía está buscando al prófugo, quien se cree que reside en la zona de Lomas de Tafí. Las autoridades continúan con la investigación para dar con su paradero.