La crisis económica en Argentina está afectando seriamente la labor de los cardiólogos, especialmente en la colocación de stents, según alertó el Colegio Argentino de Cardiólogos Intervencionistas (CACI) en un comunicado. La emergencia de la especialidad ha sido declarada debido a las dificultades en la atención de pacientes que requieren angioplastias o stents, poniendo en riesgo la actividad de la disciplina.
“De no mediar una solución en el mediano plazo, toda la actividad va a verse paralizada, generando un impacto incalculable sobre la salud de la población en toda la Argentina”, advirtieron desde el CACI.
La problemática radica en el aumento exponencial del costo de los equipos y los insumos médicos, junto con la baja sistemática de los honorarios profesionales. Esto está ocasionando la reprogramación de prácticas y demoras en realizarlas, lo que afecta directamente la salud de los pacientes.
Según el doctor Arturo Fernández Murga, cardioangiólogo intervencionista, “No hay falta de insumos; este es un problema económico y administrativo”. Aunque aclaró que no han dejado de operar en ningún momento.
Los insumos necesarios para la especialidad son importados y han experimentado un gran aumento en sus costos en los últimos meses, como mencionó el cardiólogo Aldo Prado. Esta situación ha llevado a algunos médicos a emigrar en busca de mejores condiciones laborales, lo que podría resultar en una escasez de médicos y cierre de centros de alta complejidad, afectando la salud cardiovascular de la población.
“Los precios de los insumos se dispararon, no así las coberturas de obras sociales que siguen pagando valores standard por módulos que incluyen las prácticas, la internación, honorarios médicos e insumos. Al subir los costos de los insumos, debemos sacrificar los honorarios médicos”, expresó Luis Aguinaga, ex presidente de la Federación Argentina de Cardiología.
La falta de actualización en los honorarios médicos y la demora en los pagos a los especialistas han llevado a una situación crítica en la atención de enfermedades cardiovasculares, la primera causa de muerte en Argentina.
Fuente: La Gaceta