Efectivos de Didrop Norte llevaron a cabo el decomiso de más de 31 kilos de drogas, incluyendo marihuana y cocaína, en un operativo realizado en el puesto limítrofe de Cabo Vallejos, en la ruta 9 al norte de la provincia. Este hallazgo arrojó información crucial sobre las prácticas de los narcotraficantes, quienes siguen comprometiendo a personas de bajos recursos para transportar estupefacientes y mantienen una operación activa desde el norte argentino.
El decomiso se realizó durante un control preventivo en el marco del Operativo Lapacho. Los efectivos detuvieron a un ómnibus que venía de Metán, Salta, con destino a la terminal de El Bajo. Tras la inspección de las bodegas, se encontraron las drogas en dos valijas y se identificó a sus propietarios.
Según fuentes policiales y judiciales, los sospechosos podrían haber sido contratados por los verdaderos narcotraficantes para transportar la droga, a cambio de una suma de $100.000. La estrategia era que los implicados llevaran la sustancia hasta la terminal y luego la entregaran al propietario.
Los investigadores decidieron no dejar que el ómnibus continuara su viaje para detener a los dueños de la carga, sospechando que podrían haber utilizado a otras personas para vigilar a las “mulas”. Se presume que los dueños estaban al tanto del decomiso de la droga.
El sello encontrado en la cocaína indica una posible conexión con Reinaldo Delfín Castedo, conocido como “El Patrón del mal”, un narco detenido por tráfico de drogas y homicidio en una cárcel federal de Buenos Aires, quien sigue operando desde prisión. Además, el uso de sellos característicos como una calavera en la marihuana sugiere la participación de grandes grupos narcotraficantes, cuyo objetivo es identificar la procedencia y calidad de la droga.
Este operativo también reveló que en Bolivia y el norte argentino se están produciendo grandes cantidades de marihuana. El Operativo Lapacho ha permitido incautar 34 kilos de esta droga desde noviembre hasta la fecha del último reporte, el 25 de marzo.
