Ayer, la fuerte tormenta golpeó a Concepción, desencadenando viento, granizo y lluvia. Aunque no hubo víctimas, la ciudad sufrió la caída de árboles y la destrucción de cables eléctricos, dejándola sin energía y agua por cerca de cuatro horas.
La tempestad, que comenzó alrededor de las 16 horas, llegó después de una jornada agobiante con 34 grados de temperatura y más del 70% de humedad. En Nasif Estéfano y Matienzo, a tres cuadras de la plaza principal, un enorme árbol bloqueó la calle sin causar daños a vehículos o peatones, gracias a la providencial ausencia de tráfico en ese momento.
Equipos de la municipalidad y de EDET trabajaron para despejar las calles y reparar la red eléctrica dañada. Otra área afectada fue Junín al 200, donde un imponente árbol solo causó daños en el sistema eléctrico.
El jefe de la Regional Sur de la Policía, Marcos Barros, informó que, curiosamente, esta vez la tormenta no afectó La Cocha, donde la semana pasada un tornado violento causó estragos en más de 50 casas. Hasta las 19 horas de ayer, en el sur de la provincia no cayó ni una gota de agua, según Barros.
En Monteros, las fuertes ráfagas de viento generaron incidentes, incluyendo voladuras de techos, cortes de cables y caídas de árboles. Afortunadamente, no se reportaron víctimas ni heridos. En el barrio Presidente Roca, un cable eléctrico quedó suspendido sobre una tapia, mientras que en Villa Nueva, dos chapas salieron volando sin causar daños adicionales.
En otro incidente destacado en Presidente Roca, un enorme árbol de eucalipto cayó sobre una vivienda, causando daños materiales.
Fuente: El Monterizo y La Gaceta