El Juzgado Federal N° 1 de Tucumán tomó la decisión de procesar con prisión preventiva a dos líderes sindicales, acusados de encubrimiento en el caso de la desaparición de Marita Verón. El juez subrogante, José Manuel Díaz Vélez, aceptó la solicitud del fiscal Agustín Chit, quien pidió el procesamiento de Norberto Manzano, Secretario General de la Asociación del Personal Jerárquico del Agua y la Energía (APJAE), y Carlos Alberto Rojas, líder de la delegación Tucumán, por supuestamente ocultar información crucial relacionada con la desaparición de Marita Verón.
El caso comenzó con una denuncia presentada ante la Procuraduría contra la Trata y la Explotación de Personas, en la que se mencionó un evento en el Hotel Bicentenario de Tucumán el 20 de marzo de este año. Durante esa reunión de afiliados de APJAE, se afirmó que Norberto Manzano tenía una carpeta con fotos de Marita Verón, que sugería que ella había fallecido dentro de la sede del sindicato Luz y Fuerza y luego fue trasladada a un sanatorio bajo la responsabilidad de Julio Luna, quien ya falleció, y las autoridades actuales de ese sindicato.
La denuncia alegó que Manzano habría usado esta información para ejercer presión sobre Luna en asuntos gremiales. Posteriormente, se descubrió que la carpeta con fotografías había sido entregada por Rojas a Manzano, lo que llevó al pedido de procesamiento.
El fiscal Chit argumentó que Manzano y Rojas tuvieron acceso a información relevante sobre la desaparición de Marita Verón y no la compartieron con las autoridades judiciales, lo que habría contribuido al encubrimiento de los responsables del delito. Se considera que su acción entorpeció la labor de la justicia.
El juez Díaz Vélez respaldó la solicitud del fiscal y procesó a Manzano y Rojas sin ordenar su prisión preventiva. Además, se les impuso un embargo de cinco millones de pesos a cada uno. Ambos están siendo acusados de encubrimiento agravado en relación con el delito de trata de personas con fines de explotación sexual cometido en el caso de Marita Verón.
Este caso plantea nuevas preguntas sobre la desaparición de Marita Verón, que continúa sin resolverse después de 21 años, y ha causado un gran impacto público debido a las evidencias recuperadas que vinculan a diferentes instituciones con su posible destino o la ocultación de su cuerpo sin vida.