Luego de las elecciones primarias, el Gobierno planea anunciar una suma fija para asegurarse de que ningún trabajador gane menos de la línea de pobreza, que es de 232,000 pesos. Gerardo Martínez, líder de la CGT y del sindicato de la construcción, confirmó esto.
La medida se aplicaría a través de un decreto u otro medio similar. En junio, la canasta básica fue valuada en $232,426 como el límite para que una familia no sea considerada pobre.
El ministro de Economía, Sergio Massa, ha estado discutiendo esta propuesta con la CGT en los últimos meses. Martínez mencionó que el método exacto aún no está decidido, pero que Massa está a favor de avanzar en esa dirección.
La idea es dar una suma fija a los trabajadores cuyos salarios, según sus convenios laborales, estén por debajo de la línea de pobreza. Esto no debería afectar las negociaciones salariales y busca brindar ayuda a aquellos que están en la formalidad pero no llegan a cubrir sus necesidades básicas.
Aunque la mayoría de los trabajadores formales ya ganan más que la línea de pobreza, esta medida podría impactar a sectores con salarios iniciales bajos, como servicios, comercio e industrias menos calificadas.
Massa expresó su intención de mejorar los ingresos de manera respetuosa a las paritarias, sin perjudicar las discusiones salariales en curso.
