En un domicilio de Pasaje 17 de Octubre en la zona de la Diagonal Norte al 2.000, una familia se retiró a dormir la siesta y dejaron el brasero encendido. Cuando se despertaron la casa estaba envuelta en llamas.
Miguel Grau de 50 años ingresó al Hospital Centro de Salud con graves quemaduras, mientras tanto su mujer Romina Rivadeneira de 24 está fuera de peligro. Por otro lado una bebé de cuatro meses permanece en observación en el Hospital de Niños, a la espera de un diagnóstico.
Foto: Redacción Abierta