Los mensajes se acumulaban a medida que pasaba el tiempo. Pese a haber accedido una primera vez, el hombre amenazado, un sacerdote, sabía que la extorsión no se acabaría pese a haber entregado 10.000 pesos.
Tres personas fueron detenidas por la Policía de Tucumán luego de amenazar a un sacerdote. De acuerdo a los primeros datos aportados por la Justicia, los sospechosos le habrían pedido al eclesiástico la suma de $ 50.000, ya que de no hacerlo, planeaban difundir supuestos videos y fotos de él en fiestas íntimas donde se consumía drogas.
La aprehensión de los tres delincuentes ocurrió luego de que los agentes fueran alertaron por el propio cura sobre el hecho. Ante esto, desde la fuerza armaron un plan y le solicitaron al sacerdote fingir un encuentro con estas personas para depositarle el dinero. Se informó, además, que ya le había dado previamente $ 10.000.
Siempre de acuerdo a los datos aportados por la Justicia, el encuentro se dio en un bar de la capital, donde policías disfrazados esperaban el momento. Fue allí cuando pudieron dar con los extorsionistas, que fueron delincuentes por miembros de la fuerza.
El Arzobispado emitió una comunicación a raíz del hecho registrado.
“El Arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Sánchez, enterado de la situación por los medios de comunicación, se encuentra profundizando en la información y trabajando en la búsqueda del camino más justo para la Iglesia”, empieza.
“Cuando se maneje nueva información de interés público se pondrá oportunamente en conocimiento de la comunidad. Mientras tanto, el arzobispo invita a los fieles y sacerdotes a unirse en la oración y a trabajar incansablemente por una autentica conversión de todos. Encomendando a todo el pueblo de Tucumán al cuidado de la Virgen de la Merced agradece la paciencia y el respeto”, finaliza.