El ex jefe de Policía Hugo Sánchez continuará en prisión luego de que la Justicia rechazara una vez más el pedido de libertad condicional solicitado por uno de los condenados por el encubrimiento del crimen de la estudiante Paulina Lebbos, registrado en 2016. Sin embargo, pese al rechazo de la solicitud, Sánchez cumple su condena en su domicilio.
El juez Ortega indicó que el rechazo se debía a que no se habían cumplido basándose ciertos requisitos legales para que el pedido prospere. Los abogados de Sánchez no presentaron los informes del servicio penitenciario y tampoco el condenado se sometió a los estudios psiquiátricos solicitados oportunamente. Pero también el magistrado consideró importante la falta de reconocimiento de Sánchez sobre el delito y los dos procesos penales pendientes que se sustancian en su contra. El primero es por amenazas durante el juicio contra uno de los testigos, el ex jefe del servicio forense Vázquez Carranza y el segundo por incumplimiento de los deberes de funcionario público.
El ex jefe de policía fue condenado en febrero de 2019 con Eduardo Di Lella, ex secretario de Seguridad, Nicolás Barrera, ex subjefe de Policía y al ex jefe de la Unidad Regional Norte, Héctor Rubén Brito. En la audiencia estuvieron presentes Alberto Lebbos, padre de la víctima, y su representante legal, Emilio Mrad.
El 21 de septiembre del año pasado, los miembros de la Corte Suprema de Justicia de la provincia Claudia Sbdar, Stela Maris Arce y Wendy Kassar, confirmaron las condenas del juicio que había llevado adelante los jueces Dante Ibañez –presidente- y los vocales Carlos Caramutti y Rafael Macorito. Pero además dispusieron que se investigue al ex gobernador José Alperovich y al ex subsecretario de Seguridad, José Ardiles, por haber aceptado el ascenso del ex comisario Enrique García, cuando ya estaba imputado por presuntas irregularidades en la investigación del caso
Ya en mayo de este año, Sánchez había solicitado que se le otorgara la libertad condicional, al haber cumplido las ⅔ partes de la pena, pero también se había rechazado su pedido.
El crimen de Paulina ocurrió el 26 de febrero de 2006, cuando la joven salió de un boliche ubicado en la zona del ex Abasto, donde había ido a bailar con su amiga Virginia Mercado. Ese día, de ese día, ambas subieron a un remís color bordó: Virginia descendió primero en su domicilio de La Rioja al 400 y Paulina siguió viaje supuestamente hasta la casa de su novio, César Soto, aunque nunca llegó. Pocos días después se encontró el cuerpo de la estudiante a la vera de la ruta 314, que conduce a Tapia.
En 2014, el ex policía García fue condenado a cinco años de prisión por el encubrimiento del crimen, al determinarse que fraguó actas de la declaración de un testigo y del hallazgo del cadáver. Luego se desarrolló el juicio contra los responsables del área de seguridad de la provincia, y además se remitieron actuaciones para que investigue a posibles autores del “homicidio” (Sergio Kaleñuk, Soto y Jorge Hernán Jiménez); y por posible “encubrimiento” (Fernando Vázquez Carranza; Lilia Amelia Moyano de Colombres; Juan Pedro Cruzado; a los comisarios retirados Segundo Marcial Escobar, Alfredo Gerardo Jiménez y Luis Antonio Santana; Virginia Nazarena Mercado; Daniel Paz; Gustavo González; Rubén Urueña; Rodolfo Maruf; Mario Alberto López Herrera, entre otros), y por “falso testimonio”.
Finalmente, el 20 de diciembre del año pasado se condenó a seis años de prisión al ex fiscal Carlos Albaca por el delito de “incumplimiento de deberes de funcionario público y encubrimiento agravado”.