Drama. Estupor. Shock. Cuando sucede una cosa como esta no puede decirse mucho. Nada es suficiente. La comunidad de Trancas no terminaba de entender anoche lo que había pasado.
Noelia Sosa tenía 30 años y dos hijos. Se quitó la vida luego de que el domingo al mediodía se presentara en la comisaría de Trancas a realizar una denuncia por violencia de género. No se la tomaron. La mandaron a su casa. Le pidieron que regresara después. Antes, la mujer había sufrido la salvaje agresión de su pareja quien la tomó de los pelos y le destrozó el celular. En un estado emocional desequilibrado, sin salida, sin ayuda, al llegar a su casa tomaría la drástica decisión.
La familia de la mujer explica que a Noelia le dijeron que “no había oficial de guardia”. No puede haber ninguna respuesta que pinte mejor la desidia.
Incluso un familiar sostiene que el acusado estaba en la puerta de la comisaría “esperando que ella saliera”.
¿Quién tiene la culpa?
Un dato más. Increíble. Casi parece una macabra coincidencia. O no. Lo aporta la periodista Mariana Romero en su cuenta de Twitter. La pareja de Sosa fue a denunciarla a la misma comisaría: y los policías sí, a él se la tomaron. Creer o reventar.
Anoche hubo recriminaciones y reclamos frente a la comisaría de Trancas ante unos demudados policías de uniforme que eran filmados y apenas podían hablar. Intercambio de palabras. Asombro por las cosas que se dicen.
Hoy estalló la furia en Trancas. Miren cómo, en medio de la bronca, la gente le explica a los policías que ESTÁN OBLIGADOS A TOMAR LAS DENUNCIAS POR VIOLENCIA DE GÉNERO EN EL MOMENTO pic.twitter.com/fDtw8YiKJl
— Mariana Romero (@MarianaR31) October 18, 2022
Los familiares sostienen que encontraron a Noelia devastada, rendida, al borde de lo peor. Sentía que nada podía hacer y que había llegado el final. El implicado es un productor y habían tenido una relación tormentosa que se extendía en el tiempo por los sentimientos de ella. Sus allegados dicen que él la manipulaba, intentaba controlarla, la hacía sufrir, le proporcionaba pastillas para que durmiera y no dejarla salir de casa.
Y dicen que ella “aguantaba todo”.
Para muchos, quienes empiezan a preguntarse porqué es tan difícil de explicar lo que sucedió, lo primero que debe establecerse, es si Noelia, realmente se quitó la vida. Especialmente si estaba un contexto de violencia como el que atravesaba.
Los familiares de la joven recurrieron a los servicios de Ricardo Scheuermann para que los asesore legalmente porque solicitarán la intervención de la Justicia. “No entendemos por qué no se ordenó una autopsia. Es muy probable que se haya suicidado, pero también existe la posibilidad de que la hayan colgado”, advirtió el abogado.
Anoche, los allegados a la joven marcharon por las calles de Trancas, “escracharon la casa del productor y rechazaron la presencia policial..
“La Policía siempre hace lo mismo. Cada vez que va una mujer a realizar una denuncia de estas características recibe la respuestas de que no está el oficial de turno. Eso ya no se puede tolerar más”, insistió el profesional.
El escrache llegó a la casa de la misma pareja de Noelia, sobre quien recaen ahora todas las miradas.
“El ministro (Eugenio) Agüero Gamboa debería intervenir en este tema. Es cierto que en el organigrama de la fuerza existe la norma que indica que las denuncias sólo pueden ser tomadas por oficiales, pero entonces que pongan más oficiales para que no haya más problemas de estas características”, dijo el abogado al diario La Gaceta.
El profesional insistió que hubo otra cuestión más grave que no haberle tomado la denuncia. “La desprotegieron porque no le dieron ninguna respuesta, a pesar de que el denunciado estaba en la puerta de la comisaría. Se fue del lugar muerta de miedo”, indicó.
Un comentario en “La historia de la joven que se quitó la vida porque no le tomaron la denuncia en una comisaría”