Los incidentes registrados en el hospital Néstor Kirchner obligó a que desde el Poder Ejecutivo se dispusiera, a través del Ministerio de Seguridad, de una guardia preventiva en los diferentes nodos y centros de testeos de la provincia. La medida se llevó a cabo a través del personal de Guardia Urbana en el edificio de Mendoza al 100 desde este miércoles con el refuerzo de policías a fin de que no se repitieran situaciones similares.
Desde el hospital se había hecho alusión a “cierta conducta agresiva” por parte de personas que acudieron al lugar para realizarse los testeos correspondientes, debido a las largas colas en el lugar. Una de las situaciones que los médicos pudieron ver está relacionada con el enojo de muchas personas jóvenes debido a que el personal de salud da prioridad en la atención a las personas mayores.
De acuerdo con lo que sostienen las autoridades de ese nosocomio, estas situaciones se repitieron en las últimas horas y se exteriorizaron a través del maltrato al personal de salud.
Ante la queja de los profesionales, el gobernador Osvaldo Jaldo salió a la defensa del personal de la salud y condenó los ataques sufridos. “A ellos hay que respetarlos, ayudarlos y acompañarlos. Lo único que están haciendo es cuidar de los tucumanos”, enfatizó el titular del Poder Ejecutivo