El pasado lunes se llevó adelante un juicio abreviado contra 9 ciberdelincuentes de la ciudad de Córdoba, quienes se encontraban con prisión domiciliaria en aquella provincia.
“La estafa es la defraudación causada por el autor valiéndose del ardid o del engaño. En relación al objeto subjetivo, la estafa es un delito que requiere del dolo directo que exige el conocimiento del carácter perjudicial de la disposición que se pretende y la voluntad de usar el ardid o engaño para inducir el error a la víctima a fin de que realice esta disposición patrimonial. Situaciones que encontramos en las imputaciones realizadas a estas partes”, argumentó el Fiscal.
“Conforme a las evidencias reunidas y la calificación legal expuesta, este MPF entiende que no se puede desconocer que este tipo de conducta o modalidad delictiva resulta sumamente perjudicial en la sociedad y que se incrementó en reiteración (por los modos empleados) y con temor, sobre todo, en época de pandemia”, afirmó Leguizamón.
Para ocho de ellos la pena fue de dos años y 6 meses de ejecución condicional y costas procesales. Y para otro fue de dos años y dos meses.
Además deberán cumplir, por el plazo de tres años, las siguientes reglas de conductas: fijar residencia en la provincia de Córdoba; una vez por mes deberán comparecer a la comisaría más cercana a su domicilio; deberán abstenerse de ejecutar cualquier acto de perturbación respecto a quien reviste la calidad de víctima y la apertura de nuevas cajas de ahorro; la imposibilidad de contar con armas de fuego (propia o impropia); el uso de estupefacientes y bebidas alcohólicas.
Esta investigación se enmarca en los lineamientos dispuestos por el ministro fiscal, Edmundo Jiménez, de avanzar en la persecución criminal, afectando para ello los recursos tecnológicos que se incorporaron en el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) y la capacitación permanente del recurso humano. En este caso en particular, por tratarse de delitos cometidos a distancia.
El sábado 28 de agosto se produjo la audiencia de formalización de cargos, luego del arribo desde Córdoba a la sede del Ministerio Fiscal de avenida Sarmiento al 400, del contingente (en el que fueron trasladados nueve de los diez detenidos por el MPF en Córdoba, en el marco de la investigación por estafas virtuales).
Después de varios meses de trabajo, con el apoyo de la policía cordobesa, el MPF tucumano concretó los 15 allanamientos. Las detenciones se concretaron el jueves 26 de agosto en las ciudades de Córdoba Capital, Cosquín, Río Cuarto, San Francisco y Brinkmann. Además de las aprehensiones, se incautó dinero en pesos y en dólares, posnets, teléfonos celulares, televisores, una escopeta, municiones, un revólver, tarjetas de débito y de crédito, y comprobantes de compras de bienes