El Parque de Santa Ana, diseñado por el paisajista francés Carlos Thays, fue creado hace 120 años,
El parque está ubicado entre las calles Pellegrini, Sarmiento y Belgrano, de Santa Ana, en diagonal al predio del ex ingenio.
La atractiva y misteriosa superficie de dos hectáreas refleja las características de jardín paisajista del siglo XVIII y XIX. Es el espacio verde más importante de la localidad, y allí se realizan diversos eventos culturales y deportivos.
El parque se resiste terco al paso del tiempo y a la ausencia de la familia Hileret con su dulce y adinerado ingenio.
Todavía pueden apreciarse las maravillosas especies autóctonas y del otro lado del mundo, dispuestas sabiamente por el famoso paisajista francés Carlos Tahys, el mismo que diseñó el Parque 9 de Julio de nuestra capital y el Jardín Botánico de Buenos Aires, entre otros.
El parque fue el resultado de un sueño de María Luisa, la única mujer de los tres hijos de don Clodomiro Hileret, dueño del ingenio Santa Ana.
“Un día, como hacen todos los chicos cada mañana, María Luisa ingresó al dormitorio de sus padres y se metió en la cama grande para contarles el sueño tan lindo que había tenido. Ella estaba en un lago con peces de todo tipo y tamaño; un lugar provisto de barquitos, amarradero y una gruta, donde ella subía y bajaba con sus amigas. El espejo de agua estaba en el medio de un hermoso predio de árboles gigantes y de flores exóticas”.
“Luego de describir su onírica visión, María Luisa se durmió. Y su papá le dijo a su esposa, Luisa Cayetana Dode, que para cumplir el sueño de su adorada hija debía inventarle un viaje a París. Así fue. Tal era la fortuna de don Clodomiro que pudo darle ese gusto. Al retornar María Luisa -extrañada por su larga estadía en la Ciudad Luz- se encontró con el regalo del padre por sus 15 años. ¡Nada menos que el parque!.”
Mediante la Ley Provincial N°7535 de 2004, el parque de Santa Ana fue declarado patrimonio cultural provincial. Está incluido como bien protegido dentro del punto c) del artículo 3 de esa ley.
En el parque, ubicado entre las calles Pellegrini, Sarmiento y Belgrano, en diagonal al predio del ex ingenio, se aprecian especies forestales autóctonas, y otras traídas del extranjero, desplegadas en un terreno de dos hectáreas.
“El espejo de agua estaba en el medio de un hermoso predio de árboles gigantes y de flores exóticas” refiere la historia. Hileret envió a su hija a pasear a Francia. Y durante el período que permaneció en ese país, encargó al paisajista Thays cristalizar el sueño de su hija.
Esa foto de Villa Parque Santa Ana no corresponde, es de una localidad de Córdoba.