Dibu Martínez fue la gran figura de Argentina para obtener el pasaje rumbo a la final de la Copa América ante Brasil. El arquero surgido de la cantera de Independiente se convirtió en héroe al contener tres de los cinco penales que le ejecutaron (ante Davinson Sánchez, Yerry Mina y Edwin Cardona).
Además de sus fenomenales voladas bajo los tres palos, el hombre del Aston Villa quedó en el centro de la escena por lo que en básquet es comúnmente denominado como trash talking. Es cuando un deportista utiliza distintas frases (sin llegar al extremo del insulto) para intentar intimidar o sacar de su eje al rival.
El ex Arsenal utilizó frases como “Te como hermano, lo siento pero te como”, “Estás nervioso, te estás riendo porque estás nervioso”, “Te lo atajo, mirá que te como” o “Te voy a esperar eh, tenés miedito” para desconcentrar a sus contrincantes. Además, sobresalió su forma de celebrar luego de esquivar el remate de Yerry Mina, quien también mantuvo un cruce con su ex compañero Lionel Messi.
Si bien el árbitro venezolano Jesús Valenzuela le llamó la atención a Dibu en algunas ocasiones durante la tanda de penales, el colegiado simplemente lo advirtió y nunca lo sancionó. Este accionar, según lo expresado por el ex juez argentino Javier Castrilli, no es el correcto. Según lo que expresó en su cuenta de Twitter el arquero debió ser expulsado del campo de juego.
“Martínez debió ser amonestado por conducta antideportiva antes del penal ejecutado por Mina y expulsado al festejar realizando gestos con ambos brazos extendidos y simultáneamente llevarlos arriba y hacia abajo en forma reiterada con una inequívoca lectura: haberse “copulado” a Mina”, sentenció sin rodeos el el ex árbitro.
“En la pág. 115 de las Reglas de Juego se encuentra el menú de causas por las cuales DEBE amonestarse por “conducta incorrecta”. Martínez debió ser amonestado y luego expulsado por sus gestos”, añadió Castrilli. “Distraer con palabras y comentarios a un adversario durante el juego o en una reanudación”, es el apartado que puntualiza el juez.
Para cerrar, escribió: “La importancia de la palabra. Estamos estructurados a través de ella. Influye, presiona, condiciona, engaña, atemoriza, inhibe, distrae… obtener una ventaja deportiva mediante su uso indebido es un acto desleal que afecta la deportividad. Seguir considerando “folclore” prácticas indebidas dentro del fútbol nos espeja como sociedad y condena a quien lo denuncia al escarnio público. (“con la verdad no ofendo ni temo…” José Gervasio Artigas, quién falleció casi en situación de calle en Asunción, Paraguay. Triste…). Los gestos. Pocos espacios pueden alcanzar al fútbol en cuanto a la carga simbólica que adquieren los gestos. La violencia simbólica en el fútbol se expresa a través de ellos. Es habitual encontrar en él cuestiones sexuales y de género. Proviniendo de los protagonistas es grave”.
Las palabras de Castrilli no pasaron desapercibidas en el mundo del fútbol. Uno de los encargados de contestarle fue el ex futbolista de la Selección Nahuel Guzmán. El jugador de Tigres de México puso un meme de la icónica pelea del árbitro con Diego Armando Maradona. El día del famoso “no te va a contestar”.